Esto es lo que pasa cuando un sujeto tiene demasiadas cosas en la cabeza

"Vamos a contar chocoaventuras, escribir y leer tonterias, pero mas que nada disfrutar la vida"

domingo, 2 de diciembre de 2012

A Correr...

Una hora... Una hora me toman 3 vueltas... Una hora en la que soy libre...

Durante 60 minutos encuentro 60 razones, cada una con 60 fragmentos de animo para solo seguir el ritmo de mis latidos, al principio soy mas rápido que ellos, un poco después me superan pero mas que dejarme atrás, me van marcando distancia.

Mi aliento escapa y quizá el aire empiece a sentirse mas frío. ¡Pero vamos!, soy estudiante de física, entiendo perfectamente que nada cambió en el ambiente, sino que mi cuerpo se calienta más y más, todo fruto de un esfuerzo terco que manda mi mente.

Al final estoy deshecho, a duras penas me mantengo en pie. No lo hago simplemente por que quedarme tirado se sentiría tan bien, que quizá no vuelva a casa pronto. Y ansío tanto volver que solo queda una cosa por hacer... ¡CORRER!

Nada es mas liberador para una mujer que quitarse el sostén al final del día, eso lo comprendo, lo presencié reiteradas veces, pero para mi, digamos que el equivalente es quitarme los tenis y poder sentir frescos mis pies.

Llego a casa y me doy cuenta de esa ultima hora que viví:
"El pecho duele, las piernas arden, pero el corazón... El corazón sigue"